Cada vez que celebramos o que asistimos a una boda, nos rodeamos de antiguas tradiciones, que se encargan de agregarle un toque muy personal y familiar a cada una de ellas. Con el paso de los años se han mantenido y tienen tan antiguo origen, como la tradición del matrimonio.
Vestido Blanco: Simboliza la pureza y la inocencia con la que cada mujer llega al altar para asumir con su nuevo rol de mujer casada.Velo de la Novia: El uso de este accesorio dentro de lo que es el traje de novia, nos transmite la idea del alejamiento de la vida exterior, la humildad, la inocencia y la virginidad.
Algo Viejo, Algo Nuevo, Algo Prestado y Algo Azul: Esta es una de las tradiciones más antiguas y nos dice que lo viejo simboliza los lazos de la novia con su pasado. Lo nuevo refleja sus esperanzas de comenzar una nueva vida feliz. Lo prestado la amistad y lo azul la fidelidad.
La Entrega de la Novia: A través de los años se ha perdido la antigua tradición que nos decía que cada hija era considerada propiedad del padre, por lo que llegada la hora de que la joven fuera desposada y si es que el novio contaba con toda su aprobación, se transfería la posesión de su hija al novio. Hoy sin embargo, representa la bendición de sus padres al matrimonio.
Los Anillos de Boda: Su forma circular simboliza el infinito y la eternidad, además de ser una muestra del amor por excelencia. Es un rito que proviene del siglo XV, cuando el Archiduque Maximiliano de Austria le entregó uno a María de Borgoña, quien más tarde se convertiría en su esposa.
El Anillo en el Dedo Anular: Antiguamente se pensaba que los anillos de boda se colocan en el dedo anular porque que la vena de este dedo iba directamente al corazón.
Lanzar el arroz: Esta es una costumbre importada de Asia y que tiene mucha tradición en Occidente. El arroz está identificado como símbolo de fertilidad, por lo que se acostumbra que los invitados lancen arroz a los novios deseándoles que la pareja tenga muchos hijos.
La Luna de Miel: Una antigua civilización fue la que comenzó con la práctica de la Luna de Miel, que celebraban bajo la Luna llena y después de la boda, los novios bebían licor de miel durante 30 días. El período posterior a la boda, fue a la que se llamó luna de miel. Mientras el nombre se mantuvo con el paso del tiempo, el propósito de la Luna de miel cambió, y después de la boda, los novios dejaban su familia y comenzaban su vida como pareja. Hoy la tradición sobrevive, y cada pareja toma unos días de descanso por lo general en un paradisíaco lugar.
El Pastel de Bodas: La tradición de la torta de bodas comenzó en la antigua Roma como una práctica inusual. Después de la boda un pan se rompía por encima de la cabeza de la novia simbolizando fertilidad y larga vida. Los invitados consideraban que las migas caídas aportaban buena suerte así que las recogían del suelo y se las comían. En la actualidad sin embargo, se utiliza el pastel de bodas, elaborado con exquisitos ingredientes y decorada con finos elementos. Al momento de la recepción, se reparte un trozo para cada invitado, compartiendo con todos la felicidad del evento.
Lanzar el Ramo de Novia y la Liga: En la Francia del siglo XIV, surgió una costumbre por la cual se consideraba que la liga de la novia traía buena suerte. Los invitados corrían detrás de la novia y le quitaban la liga, así es que para evitar esta práctica, las novias comenzaron a lanzar la liga voluntariamente. A lo largo del tiempo el ramo de flores se añadió como parte de esta tradición. Hoy, la costumbre ha sido dividida para que el «bouquet» se lance a las invitadas solteras y lo mismo con la liga a los solteros.
Cruzar la Puerta en los Brazos: Generaciones atrás se consideraba correcto que, para que la novia se mostrara feliz de entregarse al novio, el ya marido tenía que tomarla en brazos y atravesar con ella el umbral de la puerta del dormitorio nupcial, motivándola así a entrar.